domingo, 13 de enero de 2019

Odio en tragos Amargós

Me propuse estudiarte, postre mis manos sobre la maquina de escribir y me quede sin inspiración por unos minutos que para mi se volvieron horas, convertido en una chimenea mis ideas flotaban junto con el humo convirtiéndose en uno solo, y allí en la penumbra de las cuatro paredes entre la música leve y el silencio de la madrugada llegaste en forma de letras, dispersas, dobladas y deformes, me di cuenta que no eras tan histórica y magnifica como te había pensado el resto de mis restos pasados, eras mas anti natural que la gasolina, hasta te encendiste como esta, solo bastaba una chispa cerca de tus suspiros para prenderte y estallar, comenzabas a danzar ese tema sexual que tanto te gusto conmigo, tarareabas entre gemidos mis palabras que marcaron huellas en tu mente, tu corazón latia exaltado sin comparación y entre tacto y fricción, a los rios le hacias competencia, salte de esas escenas en un intento de creer que eramos mas que juguetes sexuales en esta vida con mas placeres que los que descubrimos sin ayuda de terceros y me llego claro como las lagrimas que una vez derramaste de impotencia, odio y decepción hacia mi, tus ideas y metas por cumplir, esculpias con tus labios y tu lengua los secretos que a nadie mas le habías confesado, le dabas forma y ampliabas mi panorama, por segundos recordé el bien dañino que le hacias a mi vida, eras como un veneno de muerte lenta, tal como las quimioterapias, si me estabas salvando de mi cáncer de vida pero estabas haciendo un dañó palpable e interno que en esos tiempos no notaba, me llego el recuerdo de cuando estabamos sentados en esa azotea que tanto vio, te dije que si alguna vez hiciste un pacto con el diablo o sabías como hacer uno, te pase una hoja en blanco y dije -"escribe tu nombre completo y apellidos acá, junto con tu edad"- procediste a hacerlo diciendo - "No se como se hace un pacto con el diablo, pero supongo que estoy firmando uno viniendo de ti todo esto."- Jamás pensé que el diablo fuera a perder un contrato, jamás me imagine que tu fueras el diablo.
Mucho menos si este fue escrito a su conveniencia, una vez termine de detallar todo lo que ibas a perder y habías otorgado con solo una firma inocente "inocente" terminaste de verme, tomaste la pagina, la leiste de pie a cabeza y con una sonrisa en la cara la quemaste mientras me susurrabas al oído "perderás" no le di importancia a nuestro, mi juego y retome nuestra conversación seguida de besos y deseo palpable, se convierte en aguas turbias mi mente y salto a aquella vez en que me ignoraste por días por una tontería, una pequeña excusa para alejarte de mi por un tiempo, también ignore ese detalle.
Heme aquí, sentado con la única compañía de unos cigarros, varios tragos de ron y una música de fondo que jamas odiaria a pesar de tus intentos por destruirla, comencé a cantarla mientras recordaba tus argumentos y debates hacia porque no debería hacer esto o no debería actuar de otra forma, en fin, lograste hacer de un libro una libreta y de una inspiración odio en tragos amargos, hiciste de el ser mas frío en la ciudad lo que quisiste y tatuaste en mi mente algo difícil de borrar.

No hay comentarios:

Publicar un comentario